de Carlos Martagón
Casa de Cultura de Grado/Grau
2 al 15 de marzo de 2020
Lunes a viernes de 10 a 21 h.
Sábados y Domingos de 10 a 14 y de 15 a 21 h.
Sus inicios como aficionado a la fotografía se remontan prácticamente a la infancia. Ya en la adolescencia sigue un curso de fotografía por correspondencia, formación que completa a través de revistas especializadas de la época como Arte Fotográfico o Nueva Lente, entre otras. Un concurso organizado por Radio Juventud de Langreo premió dos de sus fotos. Posteriormente también diseñaría algún cartel y fotos de promoción para grupos musicales. En 2006 presenta su primera exposición que pudo verse en Langreo, Mieres y Gijón. Más recientemente participó con otros fotógrafos en una muestra colectiva en Casa del Marqués de La Felguera. Los prolegómenos de esta nueva exposición tuvieron lugar en las paredes de La Trastienda, bar musical de Luanco, a la que seguiría de manera más completa en la Casa de la Cultura de Sama y en el Cidan de Pola de Laviana.
Ha compatibilizado esta actividad con su labor como músico y compositor en grupos como Stukas, El Enano Copulador y los Espermatozoides Incontrolados, Merienda de Negros, Koniec y, actualmente, con Bolepop y Cavernícolas, además de colaboraciones puntuales con otros grupos.
Jubilado de la Enseñanza desde 2010 como profesor de Latín, ha realizado también estudios universitarios superiores de Filología Española y Ciencias de la Información además de Filología Clásica.
FOTOGRAFÍAS DE IDEAS, ARTE Y PERSONALIDAD
Reseña de Julio-José Rodríguez Sánchez
Vivas aún en el recuerdo algunas de sus potentes fotografías, de la que fue su interesante primera exposición de 2005, volvemos a encontrarnos con la sutileza profunda de un auténtico creador.
Esta nueva exposición de Carlos Martagón supone un festín para la vista. Es todo un alarde de creatividad compositiva y una muestra intangible de arte, alejada de cualquier eclecticismo que, tan a menudo, llega a suponer un catálogo de conveniencia u oportunismo, abocado a la vacuidad más desesperante.
Martagón nos invita a disfrutar de las ideas con las que alumbra su mundo creativo, que luego es capaz de trasladar a una forma de expresión estética rigurosa y por tanto convincente, en la que no hay sitio para esas molestas sombras del siempre vacío y superficial esteticismo.
Riqueza visual, sensualidad sugerente, cromatismo enriquecedor, cubismo y neofigurativismo abstracto, constructivismo, elegancia compositiva que para nada se aleja de la indagación testimonial de la realidad, constituyen la síntesis de esta inteligente, auténtica y bella exposición.
El espectador que dedique una mirada atenta a cada una de las fotos aquí expuestas, encontrará, no solo, las sensaciones apuntadas, sino que las enriquecerá y acrecentará con sus propias emociones, sintonías y argumentaciones.
Carlos Martagón nos ha ofrecido en estas fotografías su sentir, su libertad, su ritmo, su saber, su honestidad y su experiencia. ¡He ahí el secreto de su Arte!
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